El amor y la mujer

Una de las grandes evoluciones de la historia, es el de la mujer, nacimos en la historia sometidas, casi esclavas de la voluntad y ley del hombre, y no se trata de hacer denuncias de carácter feminista, lejos estoy de ello, solo trato de hacer notar que a pesar de la gran evolución de la mujer, hoy en pleno siglo XXI existen países que continúan tratando la condición de mujer como algo más que el sexo débil, es cierto, otros paises, las mujeres ocupan los más importantes cargos, tanto en política como en la sociedad en general, pero aun hoy, sin que el título de primer o tercer mundo importe, la mayoría de las sociedades sigue viendo a una mujer que demuestre hacer lo mismo que hace comunmente un hombre, como una mujer de mala costumbres en el mejor de los casos, como una prostituta en el peor de los casos, y ojo, que una prostituta puede ser una madre mejor que cualquier mujer dignamente casada y dedicada a su familia, pero se usa esa palabra para identificar a una mujer que desea a un hombre y acepta irse a la cama con él simplemente por eso, porque le gusta y lo desea, como lo hace un hombre siempre, ese simple y normal echo alcanza para separar a una mujer de otras que ante la sociedad es una mujer digna, porque se le ve en su casa, con sus hijos, y tiene una libreta que dice ser la mujer de...Si lo sé, les parecerá esto una proclama antimachista, una plataforma reinvindicativa para proclamar los derechos de la mujer, no, no es eso, es simple y llanamente un llamado de atención a las mujeres, jóvenes, no tanto y hasta de cualquier edad, para que no se cierren al amor por el que dirán, al fin y al cabo, si decimos que la vida debe ser amor, porqué negarse a él solo por ser mujer?

jueves, 25 de febrero de 2010


MARIONETA DE TUS MANO

Dices mi piel es tersa y a ella la deseas
y mi piel se transforma cuando haces ese acto
ella brilla y se enciende cuando siente al fin tu tacto
y se muestra a ti desnuda porque quiere que la veas.
Así me siento marioneta con movimientos sin vilo
a expensas de tu capricho que hacia ti me conduce
y advierto tu deseo por mi piel que a ti se luce
y obedezco a tu deseo y a ti conduce mi hilo.
Juego de placer el tuyo, quizás solo juego
pero que juego encantada y sabes bien no miento
y que juego a tu merced segura de lo que siento
y que al jugarlo me excito tanto que soy un fuego.
A tu merced me muevo con placeres insanos
que me transportan a otros mundos por tu deseo echo furia
que me mueve en el ritmo de la pasión y lujuria
y a lo que mandan y quieren tus caricias y tus manos. 
Solange García Clderón
Copyright©2010

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